"No podemos cambiar, no podemos alejarnos de lo que somos hasta que aceptamos lo que somos. Entonces el cambio parece llegar casi desapercibido.."— Carl Rogers
El significado de la palabra reconocimiento procede del latín, más específicamente se conforma por tres partes de ésta lengua: el prefijo “re”, que es el equivalente a “repetición”, el verbo “cognoscere”, que puede traducirse como “conocer”, y finalmente el sufijo “-mento”, que es sinónimo de “instrumento”.
Se conoce como reconocimiento a la acción y efecto de reconocer o reconocerse. El verbo refiere a examinar algo o a alguien con cuidado, a registrar algo para conocer su contenido, a observar alguna situación y/o aceptar un nuevo estado de cosas.
El reconocimiento puede ser la acción de distinguir a un sujeto o una cosa entre los demás. Dicho reconocimiento se logra a partir del análisis de las características propias de la persona o el objeto. Cuando se reconoce se concreta la identificación.
También puede ser el acto que se expresa en una felicitación o un agradecimiento. Al recibir un diploma en un acto deportivo o en un acto artístico.
Podríamos decir que hay reconocimientos de diversos tipos. Sociales, culturales, médicos, etc.
Aquí me gustaría hablar sobre el reconocimiento propio, la motivación que necesitamos generar hacia nosotros mismos.
Estoy de acuerdo que la motivación en las persona tiene que ver con recibir respuestas positivas por parte del entorno a fin de estimular la repetición de nuestra conducta realizada, sin embargo, nuestro propio reconocimientos es el más importante.
Cuando en nuestro entorno no recibimos reconocimiento, comenzamos a experimentar sensaciones de deterioro, como depresión, angustia, culpa, derrota, desaliento, incapacidad, menosprecio, etc.
Si permitimos invadirnos por estos sentimientos, estaremos muy devastados. Habría que explorar, para qué tenemos estos sentimientos, para qué no nos permitimos reconocernos como seres de luz, como seres de evolución.
Cada uno de nosotros tiene herramientas básicas de evolución que necesitamos utilizar para nuestra supervivencia y una de ellas es el poder de nuestro reconocimiento.
Reconocerme como un ser potencialmente divino me hace sentirme capaz de librar cualquier batalla en la vida para poder salir avante.
No centrarnos en el resultado, sino aprender a reconocer el proceso del esfuerzo, del camino andado, es un gran paso hacia nuestro reconocimientoAún si no hemos todavía llegado a nuestra meta, el reconocer los logros en el transcurso de lograr nuestra meta, es un gran paso.
Te invito a que reconozcas tu ser, tu valía interna y tu esfuerzo diario.
Sant Subagh Kaur
FB Sant Subagh Kaur
[email protected]
.