Por: Sant Subagh Kaur (Rocío Borbolla ॐ)
Cada palabra que se pronuncia es un decreto que se manifiesta en lo exterior. La palabra es el pensamiento hablado.
Como vimos ya en nuestro artículo anterior de “Abracadabra el poder de la palabra” que todo lo que está en la naturaleza tiene una vibración que es un principio universal y que impacta en nuestras células, tejidos, órganos, todo está compuesto por átomos que vibran en distintas frecuencias. Así, nuestros pensamientos también están vibrando en una inmensa sintonía, la cual puede frecuentemente desequilibrarse.
Tomando en cuenta ésta condición, comprendamos que podemos cambiar nuestra vida, nuestra realidad con pensamientos que se pueden volver nuestros decretos conscientes o inconscientes, esto dependerá de que tan despiertos estemos.
Recitándolos interiormente, desde el corazón y a menudo, para que se graben en el subconsciente, reprogramando así nuestra mente, volviéndose poco a poco mensajes muy potentes como subliminales. Si crees que la vida es dolor y sufrimiento, así será para ti, y si tu amigo cree que la vida es maravillosa y mágica, así será su vida. Ambos tienen razón porque nuestros pensamientos dominantes y nuestras creencias se manifiestan en nuestra vida creando nuestra realidad constantemente.
“Nada te ata excepto tus pensamientos, nada te limita excepto tu miedo, nada te controla excepto tus creencias” (Marianne Williamson)
Los pensamientos positivos nos ayudan a reprogramar la mente, elaborando así nuestros decretos ayudarán a crear nuestros deseos, recordando evitar hacerlos en tono negativo, por ejemplo, evitando pensar o decir: “Yo no quiero enfermar”, en su lugar pensar o decir: “Yo deseo sanar”. También evitando enviar señales de carencia al Universo porque volverán a nosotros aumentadas, por ejemplo, evitando pensar o decir: “Yo necesito amor, o dinero, o felicidad, etc”, en su lugar pensar o decir: “Yo deseo amor, dinero, felicidad, etc” (Recordando que los decretos pueden hacerse siempre en tiempo presente).“Cada palabra que pronunciamos es un decreto que se manifiesta en lo exterior. La palabra es el pensamiento hablado. No te sorprendas ni te quejes si al expresarlo lo ves ocurrir. Lo has decretado”. Metafísica 4 en 1 (Pag 25-26)
Repetir nuestros decretos 3 veces seguidas, al menos una vez al día, para que se graben en nuestro subconsciente, así podremos cambiar nuestra vida y nuestra realidad. Es primordial unir las palabras con el sentimiento y confiar. Soltar el resultado y agradecer pues confiamos totalmente que ya está hecho. Esto último acelerará su manifestación.
Cada quien puede adaptar el decreto según sus deseos y requerimientos… Para que funcione, es imprescindible decirlo con sentimiento varias veces al día, confiar, y por supuesto agradecer.
Encuentra un buen momento para decirlas, desde mi experiencia personal, en la naturaleza me funciona, para mi ese es un lugar idóneo para decir estas afirmaciones positivas porque estoy relajada, y también es buen momento antes de dormir, procurando estar relajados y centrados para hacerlo.
“La clave del éxito está en tener pensamientos positivos, actitud positiva y creer en ti mismo/a”
Namasté
Sant Subagh Kaur
FB Sant Subagh Kaur
[email protected]
ॐ