El origen del Ángel de la navidad surge cuando hace más de 2000 años, un 21 de diciembre, una luminosa esfera de luz guía a los tres reyes magos para que encuentren al niño Jesús en el momento de su nacimiento.
Siempre se ha dicho que el mayor talismán es una mente enfocada y el mejor ritual para lograr el éxito es la disciplina, sin embargo el escribir nuestros deseos a cumplir elevando estas peticiones al Ángel de la Navidad es muy poderoso ya que este Ángel es muy milagroso.
Pasos a seguir:
1.- El día 20 de diciembre realiza una limpieza de casa colocando 9 varas de incienso copal en diferentes áreas de tu casa y que hagas ruido con un diapasón o una campana, también que muevas los muebles e lugar para mover la energía. Esto preferentemente hazlo de las primeras horas de la mañana hasta las 12 del día.
2.- El día 21 tener listo un sobre dorado o rojo, una hoja de papel amarilla, al menos 3 tipos de semillas, una vela roja y un cuarzo citrino.
3.-De preferencia también en las primeras horas de la mañana del día 21 hasta las 3 de la tarde se enciende la vela roja y se comienza a escribir una carta sobre la hoja amarilla, la cual se divide en tres secciones:
La primera se agradece todo lo que recibimos en el año en curso
Segunda, se realizan las peticiones generales en donde podemos escribir el pedir algo por nuestro planeta, por nuestra ciudad, o por nuestra familia.
En la tercera parte vamos a escribir todos los deseos que pensamos materializar en el próximo año y preferentemente les vamos a colocar una fecha límite.
4.-Al terminar nuestra carta la vamos a guardar en el sobre rojo o dorado y le vamos a colocar dentro el cuarzo citrino.
5.- Cerramos el sobre y lo guardamos en el cajón de nuestra ropa, en nuestro altar angélico o personal o en un lugar muy especial para nosotros, ya que no podremos abrir esa carta hasta el 21 de diciembre próximo en el que hagamos una nueva carta y comprobemos cuantas cosas se nos cumplieron.
6.- Después colocamos las semillas sobre un plato hondo repitiendo el siguiente decreto:
“Amado Ángel de la Navidad, yo decreto que el año venidero lograré todos mis proyectos y peticiones.
Yo genero cada día mayor salud, amor, éxito, dinero, felicidad y abundancia.
Hecho está, hecho está, hecho está”.